Gran actuación de los chicos del Globalia Artes Gráficas-Zamora Enamora como anfitriones en la Vuelta a Zamora, consiguiendo subir al pódium en varias ocasiones para sumar varios premios cuya recompensa en metálico se donará íntegramente en beneficio de la Sierra de la Culebra, afectada por el mayúsculo incendio de hace un mes.
“Estaba convencido de que íbamos a hacer un buen papel, pero la verdad es que los chavales han superado todos los pronósticos. El maillot del Globalia-Zamora Enamora es uno de los que más ha lucido en esta vuelta y ese ya es un objetivo clave conseguido. En marzo se nos dio muy bien el díptico zamorano y ahora sobresalimos en la Vuelta a Zamora, así que se ve que en casa sacamos nuestra mejor versión”, este era el balance de Iván Rodríguez, director del equipo.
A pesar del calor y las altas temperaturas, no hubo jornada sin el protagonismo de los pupilos de Rodríguez, filtrándose en multitud de fugas y peleando por cada punto clave de la carrera. Diego García recibía el premio al mejor zamorano en la espectacular e histórica cronometrada inaugural celebrada en la localidad portuguesa de Bragança. Ya en la primera etapa en línea era Jorge Gálvez el que entraba en la fuga del día, sumando puntos para la clasificación de las metas volantes que pelearía hasta el último momento, quedando en segundo lugar.
Sobresaliente carrera en el tercer parcial por la comarca de Sayago, donde de nuevo se filtraban hasta cuatro ciclistas del equipo en la aventura triunfadora que finalizó en Bermillo. Eder Izcara, Alejandro Martínez, Alejandro Rodríguez y, otra vez, Gálvez tomaron las riendas de esa escapada que acabó venciendo el pulso a los favoritos, consiguiendo el primer top-10 en la ronda.
Las dos últimas fechas tuvieron en Sergio Arias a uno de los mejores corredores de todo el pelotón. Primero en la tradicional etapa reina por la Alta Sanabria, donde el costarricense coronaba el durísimo Marabón con los mejores de la general, para en el muro definitivo de Hedroso cruzar la línea de meta en sexto lugar. El cierre se vivía entre Cobadú y Toro y antes de que Arias volviera a estar en la pelea de la victoria en la escalada final a la Cuesta Cavila, Izcara, Bayán y Gálvez volvían a hacer de la suyas, filtrándose en las múltiples fugas desde el primer hasta el último kilómetro.
Esa entrega obtuvo el resultado de que el burgalés Eder Izcara se llevase el Premio Especial Grupo CT, mientras que al madrileño Jorge Gálvez se le otorgaba el merecido premio a la combatividad. Este último, con sus padres presentes, subía al pódium en Toro muy feliz: “El equipo tenía que conseguir subir al pódium, y mira, al final por partida doble en el último día. Creo que es muy justo tener esta foto tras seis días de ataques continuos”.
Sin tiempo para el descanso, parte del equipo afrontará a partir de este miércoles y hasta el domingo otra de las grandes vueltas de la temporada, la Vuelta a Madrid sub-23. Desde la dirección del equipo se comunicaba que en cuanto se sepa la cuantía de los premios recibidos se anunciará la cantidad total y se producirá la entrega del valor metálico para ayudar a la comarca de la Sierra de la Culebra, que está viviendo semanas muy complicadas por el duro castigo de los incendios.